La personalidad reactiva y sus consecuencias en el peso

Deja de reaccionar y experimenta la sensación de libertad que produce elegir cómo te quieres sentir.

Reaccionar ante todo aquello que te rodea, es como si depositases el poder de tus emociones en manos de otra persona o circunstancia.

Si hay algo que se repite en las primeras sesiones de coaching para adelgazar, es el estilo reactivo de la mayoría de nosotros ante cualquier estímulo externo.

«No he podido porque…»  Y aquí puedo escuchar cualquier cosa.

Desde que ha habido conflictos en el trabajo, un hijo que ha dado problemas, una enfermedad familiar, o incluso un viaje de fin de semana.

Cualquier contratiempo desestabiliza las buenas intenciones de ir al gimnasio, cuidar la alimentación, leer un rato, dar un paseo o cualquier otra cosa.

Y eso es como condicionar tu estado de ánimo según los demás o las circunstancias que te rodean.

Tú no eliges.
Sólo reaccionas ante aquello que te va sucediendo a lo largo de tu vida.
Como una cerilla que prende ante cualquier estímulo.

Y por eso dejas en manos de otros tu propia vida.

Comer emocionalmente tiene mucho que ver con reaccionar ante cualquier contratiempo acudiendo a la comida.

Te tengo que confesar que cuando me di cuenta que era una persona bastante reactiva, fue uno de mis mayores descubrimientos.

Sentía que tenía que estar a la defensiva para protegerme.
Siempre alerta.

Y eso resulta agotador. Es un desgaste mental muy grande.

Descubrir que durante gran parte de mi vida no había sido libre porque había puesto en manos de los demás mi manera de actuar, ha sido uno de los mejores aprendizajes de mi vida.

Ya no dependo de si alguien me trata como merezco o no.

Ni si hace frío o hace calor, para sentirme como yo me quiero sentir.

No dependo de los demás para elegir cómo me quiero sentir y cómo me quiero comportar.

Siento que tengo las riendas de mis emociones desde que elegí dejar de reaccionar y empezar a ser proactiva.

La proactividad nos da la libertad de elegir cómo raccionar ante aquello que nos pasa.

Ojo! Hay gente que confunde la proactividad con llevar sólo la iniciativa. Y no me refiero a eso.

Me refiero a hacerte responsable de tu propia vida.

Nuestro comportamiento depende de nuestras decisiones, no de nuestras circunstancias por muy duras que sean en ocasiones.

Las personas reactivas construyen sus vidas emocionales en torno a la conducta de los otros, permitiendo que los defectos de las otras personas las controlen. Stephen Covey

Al principio no es fácil dejar de reaccionar, pero para ello trabajamos con técnicas de coaching que a mi me ayudaron mucho y a mis clientes también les están ayudando.

No es fácil cuando durante años hemos explicado nuestros problemas echando la culpa a las circunstancias o a la conducta de alguna otra persona.

Nadie puede herirte sin tu consentimiento. Eleanor Roosevelt

Si nuestra vida está en manos de condicionantes externos, eso es porque estamos regalando el poder de controlarnos.

Un modo estupendo de tomar más conciencia de nuestro propio grado de proactividad consiste en examinar en qué invertimos nuestro tiempo y nuestra energía.

Una de las herramientas de coaching que utilizamos es la Rueda de la Vida.

Cada uno de nosotros tiene sus propias preocupaciones: la salud, los hijos, los problemas del trabajo, los kilos que nos sobran…

Cuando revisamos nuestras preocupaciones resulta evidente que sobre algunas de ellas no tenemos ningún control real y, con respecto a otras podemos hacer algo.

Las personas proactivas centran sus esfuerzos en el círculo de influencia. Se dedican a las cosas con respecto a las cuales pueden hacer algo.

Si quieres saber más te recomiendo el libro Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva.

También te recuerdo el post que escribí sobre Si quieres avanzar, deja las excusas atrás.